Arcoiris de telas


Seguimos trabajando con el agua y los colores. Hemos visto que el agua no tiene color y que al mezclarlo con pintura se transforma en ese color. Además, hemos comprobado que si metemos una tela blanca dentro de ese agua, ¡también se pone del mismo color! Así que, nos pusimos manos a la obra y teñimos telas de los siete colores del arcoiris. Una vez secas, las pegamos a nuestra nube, y ¡ya está! unos arcoiris preciosos